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Lucha libre y comida: A dos de tres mordidas sin límite de tiempo. Estudio cultural de la gastronomía en la lucha libre
Por Emiliano García
- “La lucha libre es el antojito mexicano más rico que van a poder probar y disfrutar” Danger King
Ciudad de México, 28 de febrero del 2025.- ¿Qué come la gente cuando acude a la lucha libre? ¿Qué comen los luchadores? ¿Qué importancia cultural y social tiene esta comida? Carmen Pérez y Andrés López realizaron A dos de tres mordidas sin límite de tiempo. Estudio cultural de la gastronomía en la lucha libre, una investigación que une la lucha libre y la comida como una identidad cultural. Los autores explicaron que les llamó la atención la manera en que estos dos elementos conviven simultáneamente en un mismo espacio, inspirados en que no hay muchos estudios que retratan su coexistencia.
Los autores convivieron con un aproximado de 210 luchadores pertenecientes al Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL), Lucha Libre AAA o independientes en arenas de todo México, e incluso Japón. López consideró intrigante saber qué comida y bebidas le gustan a los luchadores en un contexto donde son vistos como superhéroes o villanos.
No solo los luchadores son objeto de investigación; López y Pérez hablaron de la gran diversidad alimenticia que existe en las arenas del país, porque en todo México hay funciones de luchas, y se puede encontrar comida muy variada. Los infaltables son cacahuates, pepitas o palomitas, pero en Puebla hay cemitas y chalupas, en Guadalajara tortas ahogadas, en la Ciudad de México están los arroces del luchador Baby face; también mencionaron que en la Arena Neza se puede encontrar venta de huevos duros.
Otro elemento fundamental en una visita a las luchas es la cerveza, y los escritores consideraron curioso su consumo en esta disciplina a comparación del fútbol u otros deportes. Expusieron que, mientras en el fútbol el uso de esta bebida alcohólica puede provocar peleas y agresiones, en las luchas contribuye a un disfrute colectivo.
A la presentación asistió Kaled “El inmortal”, luchador independiente que recalcó la importancia de esta investigación, mencionando que cada arena tiene alguna tradición o ritual digno de ver, e invitó a los asistentes a probarlos siempre que visiten una.
Para concluir, los autores afirmaron que la comida y la lucha libre son patrimonios culturales unidos, que reflejan la cultura popular mexicana, y le recordaron a los asistentes que las luchas son una experiencia imperdible para cualquier persona.